Southern Border — In the midst of government actions that dehumanize migrants and violate international treaty obligations, the Southern Border Communities Coalition (SBCC) calls on all parts of the government to start with dignity in the treatment of migrants. Rather than humanize migrants, government officials are penalizing them for asserting their inalienable (human) rights to life, liberty, and the pursuit of happiness. It’s time for a reset on border policy. It’s time to refocus on human dignity.
On the eve of Title 42 ending, the Biden Administration and Congress should be focused on policies that center human dignity and honor human rights, yet their actions do anything but that. Instead, the United States is violating a number of its international obligations, including the International Covenant on Civil and Political Rights (ICCPR), a treaty it ratified in 1992, rendering it the supreme law of the land under Article VI of the U.S. Constitution. Violations of specific ICCPR Articles include:
- Inciting hostility and violence toward migrants with the deployment of 1,500 troops signaling that migrants at the border represent a threat (Article 20).
- Denying due process to legitimate asylum seekers and expelling them through the expedited removal system without hearing their claims (Article 13).
- Denying in-custody migrants humane treatment in facilities and holding in-custody migrants in corralled areas outside (between barriers) without basic necessities (Article 10).
- Subjecting migrants to cruel, inhuman, and degrading treatment through record levels of force, and policies that use death as a deterrence (Article 7).
- Denying an effective remedy for above violations through the inaction of the legislative, administrative and judicial branches of government (Article 2).
This October, the United States will be reviewed by its peers at the United Nations for its compliance (or lack thereof) with the ICCPR treaty — a treaty that the Biden Administration and Congress, as well as local and state governments, are bound to honor under the U.S. Constitution. The U.S. Government’s response to the ending of Title 42 is an opportunity to honor its commitment to uphold dignity.
Lilian Serrano, Director, Southern Border Communities Coalition said,
“The United States can be a beacon for human rights, but our current treatment of migrants at the border falls short of our international commitments. Those seeking safety at our border should be treated at all times with humanity. Every policy, every practice, every proposal must start with dignity. When we center human dignity in border policies, we create the necessary parameters to protect life, even in the most challenging circumstances. SBCC stands ready to partner with government officials and elected leaders who commit to start with dignity to develop border policies that are humane, just, and fair.”
ABOUT THE SOUTHERN BORDER COMMUNITIES COALITION
The Southern Border Communities Coalition (SBCC) brings together organizations from San Diego, California to Brownsville, Texas, to ensure that border enforcement policies and practices are accountable and fair, respect human dignity and human rights, and prevent the loss of life in the region.
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PARA PUBLICACIÓN INMEDIATA
Defensores fronterizos piden al gobierno de los EE. UU. que comience con la dignidad en el trato de los migrantes y cumpla con las obligaciones de los tratados internacionales
Frontera Sur — En medio de las acciones gubernamentales que deshumanizan a los migrantes y violan las obligaciones de los tratados internacionales, la Coalición de Comunidades de la Frontera Sur (SBCC) hace un llamado a todas las partes del gobierno para comenzar con la dignidad en el trato a los migrantes. En lugar de humanizar a los migrantes, los funcionarios del gobierno los están penalizando por hacer valer sus derechos (humanos) inalienables a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad. Es hora de reiniciar la política fronteriza. Es hora de volver a centrarse en la dignidad humana.
En vísperas de la finalización del Título 42, la Administración Biden y el Congreso deberían centrarse en políticas que centren la dignidad humana y honren los derechos humanos, pero sus acciones hacen todo menos eso. En cambio, los Estados Unidos está violando una serie de sus obligaciones internacionales, incluido el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (ICCPR, por sus siglas en inglés), un tratado que ratificó en 1992, convirtiéndolo en la ley suprema del país en virtud del Artículo VI de la Constitución de Estados Unidos. Las violaciones de artículos específicos del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos incluyen:
- Incitar a la hostilidad y la violencia hacia los migrantes con el despliegue de 1,500 efectivos señalando que los migrantes en la frontera representan una amenaza (artículo 20).
- Negar el debido proceso a los solicitantes de asilo legítimos y expulsarlos a través del sistema de deportación acelerada sin escuchar sus reclamos (artículo 13).
- Negar a los migrantes bajo custodia un trato humano en las instalaciones y mantener a los migrantes bajo custodia en áreas acorraladas afuera (entre barreras) sin necesidades básicas (Artículo 10).
- Someter a los migrantes a un trato cruel, inhumano y degradante a través de niveles récord de fuerza y políticas que utilizan la muerte como disuasión (Artículo 7).
- Negar un recurso efectivo por las violaciones anteriores a través de la inacción de los poderes legislativo, administrativo y judicial del gobierno (Artículo 2).
Este octubre, Estados Unidos será revisado por sus pares en las Naciones Unidas por su cumplimiento (o falta de cumplimiento) con el tratado ICCPR, un tratado que la Administración Biden y el Congreso, así como los gobiernos locales y estatales, están obligados a cumplir bajo la Constitución de los Estados Unidos. La respuesta del gobierno de los EE. UU. a la terminación del Título 42 es una oportunidad para honrar su compromiso de defender la dignidad.
Lilian Serrano, directora de la Coalición de Comunidades de la Frontera Sur dijo:
“Estados Unidos puede ser un faro para los derechos humanos, pero nuestro tratamiento actual de los migrantes en la frontera no cumple con nuestros compromisos internacionales. Aquellos que buscan seguridad en nuestra frontera deben ser tratados en todo momento con humanidad. Toda política, toda práctica, toda propuesta debe empezar con la dignidad. Cuando centramos la dignidad humana en las políticas fronterizas, creamos los parámetros necesarios para proteger la vida, incluso en las circunstancias más difíciles. SBCC está lista para asociarse con funcionarios gubernamentales y líderes electos que se comprometan a comenzar con dignidad a desarrollar políticas fronterizas que sean humanas, justas y equitativas”.
SOBRE LA COALICIÓN DE COMUNIDADES DE LA FRONTERA SUR
La Coalición de Comunidades de la Frontera Sur (SBCC) reúne a organizaciones desde San Diego, California hasta Brownsville, Texas, para garantizar que las políticas y prácticas de control fronterizo sean responsables y justas, respeten la dignidad humana y los derechos humanos, y eviten la pérdida de vidas en la región.
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